La higiene dental de nuestros perros es tan importante como la nuestra, ya que no sólo los utilizan para comer, también para llevar cosas, jugar... Sus dientes para ellos son tan importantes como para nosotros las manos, por ello debemos limpiar y cepillar sus dientes con frecuencia.
Podemos ayudar a nuestro perro a mantener sus dientes sanos y fuertes de diversas formas:
- Acudiendo a su veterinario a hacerle exámenes orales, por lo menos una vez al año.
- Cepillando sus dientes desde cachorro, o por el contrario si el perro ya es adulto, nunca es tarde para empezar a cepillar sus dientes. Siempre con una pasta de dientes especializada sin flúor que podrá obtener en su veterinario.
- Dándole comida y juguetes especialmente diseñados para ellos. Nunca huesos, frisbees o pelotas de tenis, ya que pueden dañar sus dientes y encías.
- Y por último, podemos darle un DENTASTIX o DENTARASK (productos recomendados por la Sociedad Española de Odontología Veterinaria) al día, ya que ayuda a reducir la formación de sarro hasta el 80% previniendo el riesgo de enfermedades periodontales.
ENCIAS:
Muchos perros sufren enfermedades en sus encías, lo malo es que el 90% de los dueños, no saben que sus mascotas padecen problemas de higiene oral.
Las enfermedades periodontales son uno de los mayores problemas en la salud de los perros. Cuando un perro come, los restos de alimentos se acumulan en la línea de las encías y, combinadas con la saliva, forman una capa que se adhiere fuertemente en la base de los dientes. Conforme se va formando, la placa se introduce por debajo de las encías provocando lesiones.
El sarro resulta de la calcificación producida por la placa dental y la saliva. Al mismo tiempo, las bacterias del sarro rodean e invaden el diente y lo destruyen. Sin tratamiento, las inflamaciones provocan la pérdida de los dientes y la atrofia de los huesos.
SINTOMAS ENFERMEDAD DENTAL:
Si nuestro perro padece una enfermedad dental, podremos saberlo o sospechar, si presenta alguno de los siguientes síntomas:
- Comportamiento: A menudo, cuando nuestro perro es menos sociable, menos juguetón... Tendemos a pensar que se debe a que se está haciendo mayor. La falta de actividad, puede ser un síntoma de una enfermedad dental. También si nuestro perro manifiesta dolor cerca de la boca o no se deja examinar, puede ser porque tiene un problema bucodental. Un perro tras un tratamiento adecuado, vuelve a actuar como un cachorro.
- Mal aliento: El mal aliento no debe considerarse algo normal en un perro. Es casi siempre el resultado de problemas bucodentales.
- Sangrado: El sangrado alrededor de los dientes y de las encías es también un síntoma de mala salud dental.
CEPILLADO DENTAL EN CASA:
Debemos acostumbrar a nuestro perro al cepillado dental muy gradualmente, por ello hay que asegurarse de que aprendan a disfrutar de la experiencia.
Necesitaremos: pasta de dientes para perros, manos limpias y uñas cortas, cepillo de dientes para perros (cerdas cortas), agua, un espacio tranquilo y muchísima paciencia.
Pasaremos por 5 etapas y cada una de ellas debe durar por lo menos 5 minutos y debe repetirse durante cinco días antes de pasar a la etapa siguiente. Cada perro es único y el entrenamiento debe adaptarse a su ritmo. Hay que tener cuidado al introducir los dedos en la boca del perro. No es aconsejable hacerlo en perros agresivos o con tendencia a morder.
ETAPAS:
Etapa 1: Introducción al sabor de la pasta de dientes.
Deberemos lavarnos las manos y poner un poco de pasta de dientes en nuestro dedo índice. Dejar que el perro lama la pasta de dientes de nuestro dedo y repetirlo varias veces.
Etapa 2: Acostumbre al perro al contacto en la boca.
Pondremos pasta de dientes en nuestro dedo índice, lo introduciremos suavemente en la boca de nuestro perro y lo deslizaremos por la superficie de sus dientes y encías. No introduciremos el dedo más allá del punto en que nuestro perro se sienta cómodo. Lo repetiremos varias veces.
Etapa 3: Introducción del cepillo de dientes para perros.
Prepararemos el cepillo con agua y pasta de dientes. Dejaremos que el perro lama un poco de pasta del cepillo. Con suavidad, sujetaremos el hocico del perro para que deje de lamer. Empezaremos a cepillar suavemente sólo los colmillos; con movimientos verticales y con el cepillo de dientes en ángulo hacia la línea de la encía, lleve el cepillo desde la encía hasta el extremo del diente. En esta etapa, debemos evitar cepillar los incisivos, ya que estos constituyen la zona más sensible de la boca.
Etapa 4: Cepillo de dientes - dientes posteriores.
Como en la etapa anterior, comenzamos cepillando los caninos (movimientos verticales). Avanzamos suavemente a lo largo de los dientes posteriores a los caninos, realizando un movimiento circular. No llegamos más allá del punto en que el perro se sienta cómodo. Cepillamos los 2 lados de la boca.
Etapa 5: Cepillo de dientes - todos los dientes.
Igual que antes, comenzamos cepillando los caninos y a continuación los dientes posteriores, y terminamos con los incisivos. Sujetamos el hocico del perro para mantenerle la boca cerrada y con suavidad levantamos el labio superior con el índice y el pulgar rodeando el hocico, para descubrir los dientes incisivos. Cepillamos suavemente los dientes anteriores mediante movimientos verticales. Gradualmente aumentaremos el tiempo de duración del cepillado. Para una protección máxima, deberemos cepillar sus dientes todos los días.
BOCA SANA, PERRO FELIZ :)
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Espero haber sido útil.
Gracias por vuestra atención.
Pasar un buen día!
